La pimienta, el verano y las buenas vibraciones

3

the beatles

Cuenta Neil Aspinall, asistente personal de los Beatles desde sus más tempranos comienzos, que un domingo de primavera los chicos y algunos amigos se reunieron en el apartamento londinense de Cass Elliot (The Mama’s and the Papa’s) para escuchar el vinilo resultante de 120 días de grabación en los estudios de Abbey Road: “La música comenzó a escucharse por todo el vecindario. Entonces, todas las ventanas se abrieron y la gente sacaba la cabeza para escuchar. Sin lugar a dudas, reconocían las voces. Nadie se quejó. Era un maravilloso día de primavera. La gente nos sonreía y nos hacía gestos de aprobación con la mano”. El vinilo que hacía sonreír a la gente, era el “Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band”

the beatlesEs casi arriesgado hablar de lo que muchos críticos consideran el mejor álbum de rock de la historia, escribir sobre este disco emblemático parece ya irrelevante, es decir, llueve sobre mojado. La cobertura mediática del álbum y el impacto que supuso su lanzamiento trascendieron los cánones establecidos hasta entonces en la industria discográfica y la acumulación de artículos, interpretaciones arbitrarias, conjeturas…..ha oscurecido un tanto lo verdaderamente esencial e importante, esto es, la música de cuatro chicos provincianos y veinteañeros que conmovió y sacudió los cimientos de los cánones musicales de la época.

Los Beatles parieron el Pepper inmersos en una época turbulenta, crítica, de transición. Una vez que actuaron en el Candlestick Park de San Francisco, en agosto de 1966, decidieron por asombrosa unanimidad no volver a tocar delante de su público. La histeria juvenil colectiva supuso una carga abrumadora e insoportable, la popularidad les agotó. Después de haberse dedicado a experimentaciones sonoras en sus dos discos precedentes, los maravillosos “Rubber Soul” y “Revolver”, los chicos se dedican a otras cosas: John rueda en España un film de Richard Lester “Cómo gané la guerra”, Paul compone una banda sonora junto a George Martin, George pasa en la India cinco semanas y Ringo se recluye en su casa de Surrey para, en sus propias palabras, “ganar algo de peso”.

El 24 de noviembre de 1966, los Beatles vuelven al trabajo en los estudios Abbey Road para firmar lo que muchos consideran el prólogo al Sgt. Pepper’s, aunque se pueden escuchar claros referentes sonoros en sus dos álbumes anteriores: el single “Strawberry Fields Forever” y “Penny Lane”. Acuciados por EMI para sacar más discos, los chicos deslumbran: cambio de imagen, unas canciones con una estructura fuera de lo que hasta ahora el público estaba acostumbrado y promoción en forma de imágenes, los primeros “videoclips” de la historia. La pasión surrealista de John y la afición de Paul por contar historias se plasman en estas dos joyas que no se incluyeron en el álbum final. En definitiva, el proceso de la grabación de un álbum emblemático había dado comienzo.

the beatlesPara dar una idea de las sesiones de grabación del Pepper y del sonido que los chicos buscaban y conseguían, qué mejor que la opinión de un visitante ilustre, David Crosby (por aquel entonces en los Byrds, grupo norteamericano visiblemente influenciado por los cuatro fabulosos), quien, por entonces visitaba Londres y no pudo reprimir la tentación de visitar Abbey Road: “Entré y ellos estaban haciendo el tonto, parecían muy felices de lo que estaban grabando, sabían lo que hacían. Me invitaron a sentarme en un pequeño c